Me duermo! (Jenni)

Me dejé caer de cara en uno de los sillones de la sala de estar y cerré los ojos. Uno de mis brazos colgaba del borde del sillón y mis dos piernas estaban apoyadas en el piso, haciendo que quedara torcido. Pero no tenía ganas de moverme. Tenía el pelo mojado, porque me acababa de bañar para poder sacarme toda la arena que tenía en el pelo y tenía la piel más cálida por al agua caliente.
Parpadeé varias veces y vi que había alguien más en en lugar.

Me había pasado todo el día en el gimnasio y luego salí al bosque a hacer unas carreras en mi forma lobuna. Cuando llegué al internado me fuí directamente a la ducha y salí de el poniendome un pijama corto y de tirante negro, los licántropos pasamos mucha calor, cogí una toalla y me revolví el pelo y me la lleve conmigo al salón, pasando antes por mi habitación mi mp5 aunque estaba tentada a estirarme y dormirme...cuando entre por la puerta del salon, con los cascos puestos y la toalla en el cuello noté una presencia y cierto olor peculiar un tanto desagradable para mi. -Estamos en las mismas, si por mi fuera ya estaría dormida...- comenté quitandome los cascos y dejandome caer en un sillón.

Moví un brazo y lo ubiqué en forma de almohada, recostando la cabeza contra él. Me tapé un poco la nariz de forma disimulada con el brazo.
- ¿Y por qué no te dormís?.- Le sonreí. - Sos demaciado deportista, eso se nota. Hoy vas a dormir muy bien.
Logré acostumbrar la nariz y giré la cabeza, para mirarla de frente.

Sacudí un momento la cabeza por el olor, pero lo pude superar. -¿ cómo sabes que soy deportista?- pregunté enarcando una ceja divertida. -¿Me has espiado?- bromeé. Lo decía porqué sabía que clase de criatura era. -Descansaría, si, pero tengo un horario...hay que cuidarse. ¿No?- comenté tranquilamente, mientras lo miraba con una sonrisa.

- Es obvio por el cuerpo que tenés. - Me acomodé rápidamente y me senté, llevando mi pelo hacia atrás, para después cruzarme de brazos. - Pero algunas veses me a llamado la atención un lobo corriendo por el bosque. - Sonreí. - ¿Tenés horario de gimnacia?

Reí dulcemente. -Todo lo que has dicho me lo tomaré como un cumplido- dije sonriendo. Subí mis piernas al sillón y las cruzé en pose india. -Bueno de gimnasia y de todo, incluyendo dieta. Yo no vivo una eternidad y lo poco que dura mi vida, comparandola con la tuya, me agradaría estar perfecta y en forma.- dije alzandome de hombros, respondiendo a su pregunta.

- ES un cumplido.- Aclaré con una media sonrisa. Subí una pierna y apoyé el pie en el sillón, para apoyar la cara en la rodilla.- Creí que los lobos vivían mucho tiempo tambien. No eran inmortales, pero sí vivian mucho.

Esbozé una sonrisa. -Si, vivimos mas tiempo que los humanos pero no rozamos la inmortalidad. Algo injusto- dije cruzandome de brazos y poniendome de morros, como la acción de una niña pequeña. -Jennifer Sean, Jenn, Jenny...como quieras- me presenté. Estabamos hablando y ni siquiera sabía su nombre y tampoco yo ahora llevaba mi colgante de oro que estaba escrito con mi nombre.

- Qué sorpresa.- Miré a un costado, como si estubiera procesando la información. Volví a mirarla- Landon Martinique.- Sonreí casi mostrando todos los dientes y lo pinchudo de mis colmillos, a pesar de que estubieran escondidos.- o Lanni... Nadie me llama Lanni en realidad.- Reí. - Un gusto.

Miré sus dientes, nada comparados con los míos...mi dentadura era fuerte y robusta, con "caninos" peefectos y todos mis otros dientes afilados así que se los mostré en plan de competición de brom. -Claro,Lanni...yo si que diré así.- dije divertida. Le miré de arriba abajo. -Desde cuando los vampiros tienen sueño?- pregunté enarcando una ceja.

- No es que tengamos sueño. - Me encogí de hombros.- Es, simplemente, cansancio. Además, dormimos de día sí queremos. No lo necesitamos físicamente pero sí ayuda a estar mejor, más si no nos alimentamos bien y estubimos mucho tiempo expuestos al sol... - Dudé.- Yo tube un... insidente con Nitti.

No era necesario explicar lo que había pasado. Era muy largo y, sinceramente, prefería olvidarme de ese día.

Pensé que sería mejor no preguntar. -Si bueno, yo también he tenido ciertos "desastres" a lo lobuno.- dije de recordandome de aquellos días locos de Grecia. -Y dime...¿eres vegetariano? ¿ O te vicias con la sangre humana?- questioné divertida,enarcando una ceja.

Reí ante lo que dijo, recordando algo que debía decirle a Nitti. Me saqué el pensamiento de la cabeza.
- Humanos más que nada. - Sonaba muy desagradable, pero era la verdad. - No de los alrededores, pero sí fuera del internado.